Hola gente linda, seguro pensarán que tiene que ver la magia en este blog, y la respuesta es: nucho; pero no es la magia que se hace con una varita dela que voy a hablar, sino de la que se hace con una raqueta y los pases mágicos son aces, reveses, voleas y si se animan "la Gran Willy".
En el mundo del "deporte blanco", que ya dejó de ser asi pero a muchos les gusta llamarlo de ese modo, existen mucha clase de tenistas pero ninguno tiene la magia interior del Mago de Rufino: les estoy hablando de Gullermo Sebastían Coria, que nació un 13 de enero de 1982 en Rufino (Santa Fe) , por influencia de su padre adoptó el tenis como su deporte favorito (a los 3 años ya empuñaba una raqueta), fue siempre un ejemplo de garra y entrega en cada partido. Muchos lo trataron de cobarde cuando se retiró durante algún partido que iba perdiendo pero tenía una lesión grave y nadie aceptó esa justificación. El miércoles 29 dijo adios al mundo del tenis profesional y esta escritora, que disfrutó cuando ganó el ATP Buenos Aires 2004 y sufrió en Roland Garrós de eses mismo año, lo va a extrañar porque soñaba con verlo jugar personalmente y ahora solo soñaré con que ganemos la Copa Davis, pero con humilda y no con la soberbia de quién se tiene que operar la cadera porque no es un buen deportista argentino.
¡Hasta la Victoria Siempre!
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